Si ya tienes una mascota, de seguro has comprobado los cambios positivos que aportan a tu salud física y emocional. Si aún no tienes, ¡este artículo es para ti!
En estos tiempos de incertidumbre, los animalitos tienen el poder de traernos esperanza y hacernos ver la vida desde otra perspectiva. Hoy te damos las razones que te faltan para que por fin te decidas a compartir tu techo con una mascota y disfrutar de su divertida compañía.
Salud Física
De optar por un perro, la necesidad de sacarlo a pasear (al menos una vez al día), nos obliga a hacer más actividad física. Está comprobado que salir a caminar puede disminuir la presión arterial, los niveles de colesterol y triglicéridos.
Salud Mental
Por otra parte, la compañía de una mascota, tiene un impacto directo en nuestra salud mental, ya que su compañía combate la soledad y la depresión. Además, estudios han comprobado que la interacción con mascotas reduce el estrés, disminuyendo así los niveles de cortisol (una hormona relacionada con el estrés).
En resumen, una mascota puede ser una gran responsabilidad, pero los cambios positivos que aportan a nuestro diario vivir cancelan cualquier gasto o sacrificio. Nuestra mayor responsabilidad es cuidar de nuestra salud y… ¿qué mejor que esta dependa de una bolita de pelos llena de amor?
Fuentes:
